Así es AK Royalty, un yate de lujo pintado con polvo de oro

Diseñado para divertirse durante largos viajes, AK Royalty es un yate de lujo de 42 metros de largo que fue totalmente restaurado. El barco se trata de un Palmer Johnson que fue pintado y reacondicionado con una pintura personalizada que contiene polvo de oro real de 24 quilates que genera un efecto brillante a la luz del sol.

Construido en 2009, y originalmente llamado Plus Too, el dueño de AK Royalty envió el barco desde Francia a Dubai, donde actualmente reside, y pasó un año entero remodelándolo. Gran parte de la renovación multimillonaria, que duró más de seis meses, se centró en transformar el exterior blanco existente en un particular y único dorado brillante.

Más sobre el yate de lujo AK Royalty

Fusionando lujo y glamour, para combinar con el tema del baño de oro, las motos de agua del yate también fueron pintadas con el mismo polvo dorado. En cuanto a sus interiores, se equipó con muebles y accesorios en la misma tonalidad que el exterior, incluyendo alfombras Fendi, espejos de gran tamaño y esculturas de tigres plateados en la mayoría de las habitaciones.

La embarcación dispone de cinco camarotes para 12 invitados y más para siete tripulantes. Además, la suite principal, amplia y con vigas completas, incluye un nuevo y amplio baño de mármol con ducha de vapor, sauna y bañera grande.

Sin dudas, la nave tiene todo listo para organizar una fiesta de punta a punta. En la cubierta principal de popa hay una cabina de DJ con parlantes de última generación y sistemas AV, con controles de iPad, en todos los rincones del barco. La cubierta de proa es una extensión con un sector de reposeras y que también se la puede configurar como una sala de cine al aire libre.

Por otro lado, para relajarse, hay un jacuzzi para seis personas en la terraza, donde también hay equipos de gimnasio y una mesa de masajes. Las mesas de comedor interiores y exteriores tienen capacidad para diez personas.

El yate tiene estabilizadores de velocidad cero para que los huéspedes se sientan cómodos incluso cuando estén anclados. Aunque eso no es todo, los huéspedes pueden probar, además de las motos de agua, seabobs, un tobogán acuático y un trampolín inflable para 12 personas. En caso de alquilar, en la tripulación del se incluye un practicante de wakeboard profesional, un pescador submarino profesional y un instructor de buceo.