Boeing es acusada de conspiración por los aviones 737 Max

El Departamento de Justicia de Estados Unidos acusó a Boeing de conspiración por los aviones 737 Max y tendrá que pagar una multa de unos 2.500 millones de dólares por mentir a la Administración Federación de Aviación (FAA), antes y después de los accidentes fatales que ocurrieron a finales de 2018 y 2019.

La sanción incluye una «multa penal monetaria» de $ 243.6 millones de. dólares, $ 1.77 mil millones que se pagarán a las aerolíneas que fueron clientes del avión y $ 500 millones de dólares que se destinarán a un fondo para ayudar a las familias y parientes de las personas que murieron en los dos choques.

«Las declaraciones engañosas, las medias verdades y las omisiones comunicadas por los empleados de Boeing a la FAA impidieron al gobierno garantizar la seguridad de las personas que vuelan», dijo la fiscal federal a cargo de la demanda. «Este caso envía un mensaje claro: el Departamento de Justicia responsabilizará a fabricantes como Boeing por defraudar a los reguladores, especialmente en industrias donde hay tanto en juego».

Se suponía que el 737 Max de Boeing era un avión que ayudaba a la compañía a seguir el ritmo de una oferta nueva y más eficiente en combustible de su rival Airbus. Pero la compañía apresuró el diseño y, como resultado, el avión fue susceptible a paradas peligrosas en ciertas situaciones de despegue. Boeing creó un software para contrarrestar este defecto de diseño al empujar automáticamente el morro del avión hacia abajo. Pero la compañía nunca le dijo ni a la FAA, ni a las aerolíneas ni a los pilotos sobre el software para ahorrar tiempo y dinero.

Algunos empleados de Boeing eran conscientes de que lo que estaban haciendo estaba mal, como se documentó en mensajes de chat internos y correos electrónicos publicados por el Congreso a principios de 2020.

Ahora, se permitió que el 737 Max vuelva a volar después de que Boeing trabajara para solucionar estos problemas, y las aerolíneas de todo el mundo están reintroduciendo lentamente el avión en sus flotas. Pero en un informe del Senado publicado el mes pasado, se descubrió que Boeing y la FAA trabajaron para manipular algunas de las pruebas que se realizaron durante el proceso de recertificación.