¿Cómo es la Antártida? Dimensiones: temperatura, flora y fauna del continente helado

La Antártida es el continente más austral del planeta y uno de los lugares más extremos de la Tierra. Su estudio es clave para comprender el cambio climático, los ecosistemas extremos y la historia geológica del planeta.

Dimensiones de la Antártida

La Antártida tiene una superficie de aproximadamente 14 millones de kilómetros cuadrados, lo que la convierte en el cuarto continente más grande del mundo. Durante el invierno austral, su superficie se duplica debido a la formación de hielo marino en sus costas, alcanzando hasta 20 millones de kilómetros cuadrados, según datos del British Antarctic Survey.

Este continente está cubierto por una enorme capa de hielo que representa alrededor del 90% del hielo del planeta y el 70% del agua dulce de la Tierra. El espesor promedio de esta capa es de 2.160 metros, aunque en algunas zonas supera los 4.500 metros, según la Agencia Espacial de Estados Unidos, NASA.

Temperatura en la Antártida

La Antártida es el lugar más frío del planeta. La temperatura más baja registrada fue de -89.2 °C en la estación rusa Vostok, en 1983. Las temperaturas varían considerablemente entre el interior y las zonas costeras:

Interior: entre -60 °C y -80 °C en invierno, y hasta -20 °C en verano.
Costas: entre -10 °C y -30 °C en invierno, y alrededor de 0 °C en verano.

Según la NASA, la región experimenta un calentamiento paulatino, con temperaturas que han aumentado especialmente en la Península Antártica.

Flora de la Antártida

La flora antártica es muy limitada debido a las condiciones climáticas extremas. No existen árboles ni arbustos. La vegetación se compone principalmente de:

Musgos
Líquenes
Algas

Dos especies de plantas con flores: Deschampsia antarctica (pasto antártico) y Colobanthus quitensis (clavel antártico)
Estas especies se encuentran principalmente en las zonas costeras y en la Península Antártica, donde las temperaturas son más moderadas.

Fauna de la Antártida

A pesar del clima hostil, la Antártida alberga una rica vida silvestre adaptada a las bajas temperaturas. La fauna se concentra en gran parte en las costas y el océano circundante:

Pingüinos: como el emperador, el de Adelia, y el barbijo.
Focas: como la foca de Weddell, la leopardo y la cangrejera.
Aves marinas: petreles, skuas y albatros.
Mamíferos marinos: ballenas jorobadas, orcas y ballenas azules.

El ecosistema antártico depende del krill antártico, un pequeño crustáceo que sirve de alimento para muchas especies.