Con solo 4 habitaciones, L’Ôtel en San Miguel de Allende es un hotel diferente

San Miguel de Allende es una de la ciudades más atractivas para visitar en México, y gran parte del mérito se lo llevan las buenas propuestas hoteleras que no dejan de crecer.

L’Ôtel Group cuenta con dos propiedades, uno es el recientemente inaugurado L’Ôtel at Doce 18, el cual es una visión más moderna en la primera planta del Concept House, el cual estuve visitando algunas semanas (ver aquí).

La otra propiedad es el L’Ôtel de Callejón de Chiquitos, una propiedad que ya resulta original por su concepto.

L’Ôtel tiene solo 4 habitaciones, lo que desde ya lo hace tan íntimo como estar en una casa.

Desde su exterior, me encontré simplemente una puerta sobre una angosta calle de San Miguel de Allende a pocas cuadras de la Parroquia de San Miguel Arcángel, el ícono de la ciudad.

Al ingresar, me encontré una cálida recepción y un lugar que rápidamente sentiría como propio por la calidez que percibí tanto en los espacios como en el personal que me recibió.

Pasando la recepción, se encontraba un espacio común lleno de detalles que se convertiría en un espacio para el relax.

Unos pasos más, el patio central, uno de los lugares favoritos dentro el hotel, y el espacio que utilicé para trabajar y disfrutar de un café.

Una pintoresca escalera es el marco que encontramos en uno de los laterales del patio, que nos llevan hacia la terraza del hotel.

Desde allí, podemos disfrutar de los magníficos atardeceres que San Miguel de Allende ofrece, y es un espacio tranquilo y solo para nosotros.

En relación a las habitaciones, cada una de las cuatro son diferentes, tanto por su decoración como por su distribución.

No sabría cual recomendar si me lo preguntaran, ya que todas tenían su encanto y ofrecían las comodidades que esperamos de un hotel de estas características.

El desayuno se realiza en un pequeño y elegante restaurant en donde se pueden disfrutar frutas de estación, panificación y una variedad de platos preparados a nuestro gusto.

L’Ôtel es más una casa que un hotel tradicional, y es una experiencia única que colaboró a que San Miguel de Allende se convierta en uno de mis destinos favoritos en América Latina.

Más información sobre el hotel aquí.