Los mejores lugares de Puerto Rico para sacar fotos y subir a Instagram

Subir fotos a Instagram en un viaje (o en casi cualquier situación) se ha vuelto algo más que habitual, desde que los teléfonos celulares empezaron a tener cámaras cada vez más sofisticadas. Y con un destino tan paradisíaco para que la experiencia sea mejor, repasamos algunos de los mejores lugares de Puerto Rico para sacar fotos y compartir en las redes sociales.

Los mejores lugares de Puerto Rico para sacar fotos

Yaucromatic

El casco urbano de Yauco probablemente sea el rincón más colorido de todo Puerto Rico. Yaucromatic es una iniciativa de arte de la organización sin ánimo de lucro “Arte para unir”, en la cual ya participaron casi una veintena de muralistas locales e internacionales. Todo empezó en 2017 y actualmente cuenta con tres ediciones de 16, 13 y 12 obras, respectivamente. Entre ellas destaca la obra “Soñadoras”, realizada en técnica 3D por la mexicana Adry Del Rocío, o el macro mural titulado “Brisa Tropical”, situado en la Calle Eugenio Sánchez López.

Calle de la Fortaleza

Sin duda la calle más fotografiada del Viejo San Juan. La Fortaleza, conocida como el Palacio de Santa Catalina, preside con orgullo la bahía con una exhibición de paraguas de colores. La estrecha calle que conduce a ella —la más antigua de la zona— es la principal arteria del casco histórico de San Juan y una importante atracción turística debido a su relevancia histórica y cultural. Comienza desde la Plaza Colón y durante todo su recorrido está bordeada por edificios gubernamentales, hoteles, tiendas de artesanías, joyerías y restaurantes, hasta convertirse gradualmente en la Avenida Juan Ponce de León hacia el este.

Mural de la bandera negra

Aunque la bandera de Puerto Rico se encuentra en cada esquina, hay una que destaca por encima del resto: la pintada de blanco y negro desde 2016 en señal de protesta en el mural de un edificio abandonado, situado en el número 55 de la Calle San José en San Juan.

Mar Chiquita

Para llegar a la Luna no hace falta ningún cohete espacial, basta con acercarse a esta Mar Chiquita en el pueblo de Manatí, una de las playas más bonitas del norte. Dos montañas de piedra caliza crean una abertura en forma de “U” que permite la entrada de las aguas turquesas, creando una cala perfecta para practicar snorkel.

Cueva del Indio

Ubicada en la ciudad norteña de Arecibo, la Cueva del Indio está rodeada de espectaculares acantilados que dan al Océano Atlántico. Recibe su nombre por los diversos petroglifos indígenas precolombinos que se encuentran en las paredes. Cerca de allí se encuentra también la Cueva Ventana, situada en lo alto de una montaña de piedra caliza, que permite contemplar Puerto Rico desde otro ángulo.

Las Salinas

El Refugio Nacional de Vida Silvestre de Cabo Rojo se encuentra a lo largo de la costa suroeste de Puerto Rico y las Salinas forman parte desde 1999. Es el hogar de más de 100 aves, entre ellas, la mariquita puertorriqueña. A su vez, es el anfitrión número uno de aves migratorias en Puerto Rico. Su variedad en ecosistemas y su valor histórico le dan el privilegio de ser un patrimonio único a nivel regional.

Charco Azul

Entre la sierra de Cayey y el municipio de Patillas hay una de las piscinas naturales más famosas de Puerto Rico. Tal como su propio nombre indica, su rasgo distintivo son las profundas aguas azules que invitan a darse un buen baño. ¡Para irse de cabeza!

Pico Rodadero

El esfuerzo de subir a 800 metros de altura vale la pena por tal de tomar la foto perfecta en el Cerro de Rodadero, en Yauco. Desde la punta se pueden observar unas maravillosas vistas del embalse Luchetti, el Cerro de las Avispas, el valle de Lajas, Guayanilla y Guánica.

Cascada Gozalandia

La Cascada Gozalandia en San Sebastián, también conocida como Charca El Roble o el Charco de la Leche, es la “Escapada Perfecta” (nunca mejor dicho, ya que sirvió como escenario para la película en el 2009). De hecho, se ha convertido en uno de los tesoros naturales más visitados en Puerto Rico.

La Zanja

En la Zanja los problemas se van flotando. Localizada en el noreste de Puerto Rico, en la reserva natural Las Cabezas de San Juan, esta piscina natural es una joya escondida esperando a ser descubierta. Para acceder a ella hay que bordear la Playa La Matita en un trayecto que dura alrededor de una hora.

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