No es momento de viajar a Europa y toques de queda en España

Si en algún momento (allá por los meses de marzo o abril) se pensó que a finales de 2020, la situación del coronavirus estaría algo controlado, las cifras muestran que se está lejos de ese objetivo. Y el caso de España es el ejemplo más claro de que este no es momento de viajar a Europa.

El presidente de España, Pedro Sánchez, decretó este fin de semana el estado de alarma, que incluye la restricción de movimientos o toque de queda, que estará vigente inicialmente por dos semanas, aunqu la intención del gobierno es que se extienda hasta el 9 de mayo de 2021. De esta forma, las personas (salvo las que desempeñen una función esencial) no podrán salir de sus casas entre las 23 y las 6 de la mañana.

Pedro Sánchez dijo que España y toda Europa tienen la obligación de aplicar nuevas medidas o endurecer las existentes para frenar la transmisión del coronavirus.

En el caso de España, el presidente recordó que la cifra oficial de contagiados ascendió esta semana a un millón y que los estudios de seroprevalencia realizados indican que el número real de personas que estuvieron infectadas supera los tres millones.

La llegada del frío y la incidencia de las enfermedades respiratorias estacionales como la gripe conforman un contexto propicio para propagar la epidemia y volver a tensionar el sistema sanitario, por lo que las comunidades autónomas han hecho un esfuerzo para adoptar medidas suplementarias con el fin de frenar los contagios.

El gobierno definió cuatro niveles de riesgo: bajo, medio, alto o extremo, en función de varios indicadores técnicos. El primero de estos marcadores es el número de casos detectados por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días. Así, una ratio de menos de 25 casos será riesgo bajo y por encima, riesgo medio. Una incidencia de 150 casos se considerará riesgo alto y, si supera los 250 casos por cada 100.000 habitantes, extremo.

Sánchez planteó «un reto colectivo» para las próximas semanas: lograr que la incidencia acumulada actual, de 348 casos por cada 100.000 habitantes, se rebaje a los 25 casos por 100.000 habitantes.

A pesar de las restricciones ya impuestas por la Comunidad Económica Europea, que permite ingresar al Viejo Continente a aquellas personas que posean pasaporte europeo, quien tenga que hacerlo, encontrará que este no es el mejor momento de viajar a Europa.