REVIEW AKA Central Park: una tentación difícil de resistir a la hora de buscar un hotel en New York
AKA Central Park es mucho más que un hotel. Son residencias con servicio de hotelería en uno de los mejores lugares de Nueva York
Norberto Sica
Alojarse en los hoteles de la cadena AKA nos brinda una sensación de bienestar especial: sentirnos como en nuestra propia casa. No importa si es un viaje familiar, o en pareja o en solitario. La diversidad de tipologías de apartamentos, el layout y decoración, otorgan una energía particular. Y en el caso del AKA Central Park el condimento adicional para los viajeros, es su cercanía con el icónico parque neoyorquino, ubicado a pocos metros.
Es el corazón de Manhattan, que se disfruta sobremanera caminando por sus calles como la Quinta Avenida, tiendas para comprar y museos como el The Met o el MoMa.
El edificio de 17 pisos cuenta con 134 apartamentos amoblados con uno o dos dormitorios.
Las habitaciones son amplias, con pantallas LED y camas king-size.
Sus cómodos livings con sillones y mesas, se funden con amplias cocinas completas que incluyen microondas, horno, cafetera, lavavajillas y heladera.
Nada falta para que la experiencia sea completa.
Como en todas las propiedades de la cadena, los productos de belleza tienen el sello de Bvlgari.
Algunos de los apartamentos cuentan con balcones con terrazas privadas, ideal para tener una vista panorámica de la Gran Manzana.
Y otros tienen una distribución más similar a un loft, en un perfect match para los que buscan una «decor» más vanguardista.
El primer nivel de la estructura, acoge el lobby principal, bar, lounge y un amplio gimnasio equipado con modernas máquinas de TechnoGym, en el que se destacan unas novedosas pantallas con colores que brindan una sensación de mayor espacio y relax.
Y si necesitamos un espacio de reuniones, también cuenta con un Business Center.
ubicaciones estratégicas, amplias residencias, servicio preferencial y un excelente precio por noche, lo que lo hace una de las mejores opciones para alojarse en Nueva York. Y en el caso de AKA Central Park, su proximidad con el parque homónimo, es algo que no puede dejar de pasarse por alto.