REVIEW Hotel Nayara Alto Atacama: un oasis en el Desierto de Atacama
El hotel y resort Nayara Alto Atacama es una de las opciones más recomendables para elegir al visitar el Desierto de Atacama en el norte de Chile
Norberto Sica
Maravilloso, sublime, extravangante y lleno de una pureza que nos hace sentir en completa libertad. Así son los paisajes del desierto más seco del mundo, donde conviven salares, formaciones rocosas cubiertas de arena, pueblos andinos, volcanes y lagunas cristalinas. Y como un oasis en el Desierto de Atacama de Chile, rodeado por las rocas rojas de las montañas de sal, nos encontramos con Nayara Alto Atacama, un refugio para disfrutar de uno de los cielos más claros del planeta, para contemplar los planetas del Sistema Solar y estrellas a millones de años luz.
Nayara Alto Atacama es mucho más que un resort o un hotel para disfrutar del Desierto de Atacama: es un lugar de maravillas donde nos conectamos con la tierra y la naturaleza, en una juxtaposición de lujo, una arquitectura estilo adobe y algunas de las vistas más magníficas.
La propiedad de terracota está rodeada por un «Parque Andino», inspirado en el diseño arquitectónico local de Atacama Village y el paisaje natural del Altiplano y sembrado de árboles de algarrobo y llamativos cactus.
Nayara Alto Atacama está ubicado en las afueras del pueblo de San Pedro de Atacama, brindando fácil acceso a actividades en el desierto y la montaña, desde caminatas por paisajes lunares, andar en bicicleta por dunas y cuevas, explorar géiseres y lagunas y, por supuesto, observar las estrellas y sesiones de astronomía en su observatorio privado.
Los programas completos de Nayara Alto Atacama permiten descubrir, dependiendo de la cantidad de días que los huéspedes decidan alojarse, recorrer lugares como:
El Salar de Atacama, el mayor depósito de sal de Chile, con una superficie de 750 mil hectáreas.
Los fascinantes Géisers del Tatio, un campo de más de 60 géiseres, ideales para visitar justo antes del amanecer. A unos 4.200 metros de altura sobre el nivel del mar, es el grupo más grande de géiseres del Hemisferio Sur y el tercero más grande del mundo, tras Yellowstone (Estados Unidos) y la Reserva natural Kronotski (Rusia).
El famoso Valle de la Luna, un sitio que se caracteriza por lo abrupto del quiebre escénico, la belleza escénica de sus colores térreos, el silencio absoluto, la escasez de humedad, flora y fauna.
Y estas imágenes son sólo un pequeño «sneak peek» de todo lo que los viajeros pueden descubrir durante su estadía, en donde lo recomendable es no permanecer menos de tres o cuatro noches.
El diseñador de interiores chileno Enrique Concha soñó el cálido pero minimalista estilo de las 42 suites, que cuentan con artesanías locales, tonos del desierto y amplias terrazas con vistas a los jardines interiores, el Valle de Catarpe o la Cordillera de la Sal.
El spa Puri, que parece un santuario, tiene saunas, baños minerales al aire libre con vista al valle y tratamientos que incorporan ingredientes como hojas de coca, murta, rica rica y quinua.
Muchos de estos productos también toman protagonismo en el Restaurante Ckelar, donde los sabores del norte de Chile se maridan con una cuidada selección de vinos locales.
Nayara Alto Atacama es una de las opciones inigualables para disfrutar de un lugar único en el planeta, haciendo honor a la historia, cultura, patrimonio, naturaleza, belleza y magnetismo que sólo el Desierto de Atacama pueden provocar.