REVIEW Hotel The Dominick New York: sin dudas, lo mejor en el SoHo

Sin dudas, su impactante fachada de piel de vidrio de más de 40 pisos sobre el límite del SoHo, en una zona conocida como Hudson Square, a pocas cuadras de la costa del río Hudson como atractivo natural, que se funde mientras caminamos con el imperdible Battery Park y luego con el complejo World Trade Center, lo ubican como un lugar al que uno no puede dejar de prestarle atención a la hora de buscar uno de los mejores establecimientos para alojarse en Nueva York. Allí, en la confluencia de las calles Spring St. y Varick St., nos recibe The Dominick New York.

El nombre del hotel proviene de una pequeña calle homónima ubicada exactamente detrás de la propiedad.

Sin dudas, The Dominick es uno de los hoteles más lujosos de Nueva York. Su amplio lobby de doble altura, cuenta con mobiliario personalizado de Fendi Casa, que incluye sofás y sillas, que se extienden a las habitaciones y suites, tanto en sus cabeceras, como en sus sofás de cama.

El vestíbulo es rico en maderas naturales, con acabados en bronce, negro y peltre, y una plétora de asientos y espacio social para los huéspedes. Y en el entrepiso, una enorme biblioteca y sala comunitaria, sirve de relax y como área de trabajo.

Con solo 12 habitaciones por piso, el hotel logra un ambiente íntimo y de sofisticación.

Más de un tercio de las 391 habitaciones son suites, con amplios ventanales de piso a techo y vistas fenomenales, algunas hacia el río Hudson y los alrededores del SoHo y otras que nos transportan más allá: hacia el Empire State hacia un lado o al One World Trade Center hacia el otro.

The Dominick ofrece algunos de los alojamientos más espaciosos de la ciudad, con habitaciones que van desde los 40 metros cuadrados hasta los 2 mil metros cuadrados, algunas de las cuales tienen living y cocina separadas del cuarto principal.

Las habitaciones y suites cuentan con un innovador sistema que permite a los huéspedes controlar fácilmente la iluminación, las cortinas y la temperatura de la habitación a través de la comodidad de una consola junto a la cama o un solo control remoto.

Los baños de gran tamaño están equipados con accesorios y herrajes diseñados a medida, con ducha de lluvia independiente, una tina de baño separada y un tocador envuelto en cuero cosido a mano rematado con mármol.

En gastronomía, Vestry es el restaurante exclusivo de The Dominick. Inspirado en la cocina estadounidense, propone platos de temporada centrado en mariscos y vegetales.

Otra de las propuestas imperdibles es Mezzanine, para disfrutar desde desayunos a comidas para el resto del día, con un menú variado y opciones saludables, sin gluten y vegetarianas, que se funden con la tradicional cocina americana.

Por supuesto, un hotel que se precie de la excelencia no puede prescindir de un gran gimnasio con equipamiento tanto para entrenamiento de musculación como aeróbico, con máquinas y equipo by TechnoGym.

The Dominick cuenta con cinco diamantes de la AAA y es uno de los hoteles que forman parte de la colección Legend de Preferred Hotel & Resorts.