Nueva York tendrá una de las canchas de básquet más altas del mundo

Es uno de los rascacielos estrella de Nueva York, no sólo por su particular arquitectura y altura, sino por ser el más alto en el barrio de Brooklyn con sus 93 pisos. Pero The Brooklyn Tower también se destacará por tener una de las canchas de básquet más altas del mundo a casi 200 metros de altura.

El rascacielos de mil pies (304 metros) abrirá en 2024 una de las canchas de básquet más altas del mundo, que estará ubicada en el piso 66.

Será el lugar más alto del Hemisferio Occidental para jugar al básquet o baloncesto.

Desarrollado por el estudio de arquitectura SHoP Architects, The Brooklyn Tower, originalmente había sido llamado como 9 DeKalb, presentando una fachada de color oscuro con detalles de metal. Los elementos de diseño están influenciados por el histórico edificio Dimes Saving Bank, que fue renovado y conectado a la torre como parte del proyecto.

El super rascacielos contendrá 150 condominios a partir del piso 53, con 400 residencias de alquiler en los pisos inferiores y más de 9.300 metros cuadrados de espacio comercial.

Además de la cancha de básquet, en el piso 66, también habrá un parque para perros, otro para jugar al fútbol y otro sector de juegos al aire libre.

Una característica es que este nivel está abierto al exterior por todos lados, permitiendo que el viento pase a través del edificio y así se reduzca el balanceo en los pisos superiores.

La fachada está diseñada de tal manera que, cuando se mira la torre desde cierto ángulo, dos lados adyacentes aparecen como si fueran un solo plano. Esta fue una referencia a los rascacielos más antiguos, como el edificio Chrysler y el Rockefeller Center.

The Brooklyn Tower, rinde homenaje al histórico edificio del banco Dime Savings Bank con una expresión contemporánea pero emblemática de su herencia Art Deco. Combinando detalles barrocos y modernos, presenta una fachada de acero ennegrecido, cobre y bronce que agregan verticalidad a la altura de la estructura.

La fachada capta los tonos cambiantes del sol durante el día, manteniendo su textura y materialidad desde todos los ángulos con formas acanaladas, cilíndricas y triangulares organizadas en un patrón vertical entre grandes paneles de vidrio que se alternan en cada uno de los seis lados de la torre.