REVIEW Sofitel Darling Harbour Hotel Sídney: con elegancia francesa

El Opera House no es el único ícono arquitectónico de Sídney. Si bien es el más conocido, hay otros como la atractiva torre Sydney Tower que con sus 309 metros de altura, es la segunda estructura de observación más alta del Hemisferio Sur.

Y a pocas cuadras se ubica la zona de Darling Harbour, un epicentro turístico y recreativo vibrante y atractivo a los sentidos.

Es el segundo puerto más activo de Sídney, en el que además de ferries, barcos y yates, confluyen atractivos como el Museo Marítimo, el Acuario, el complejo de casinos The Star y el renovado Centro de Eventos y Convenciones.

En este marco, una joya de 35 pisos emerge con su llamativa fachada de piel de vidrio con acento triangular, toques de colores y el refinado gusto francés: Sofitel Darling Harbour.

El hotel ofrece vistas únicas, gracias a ser el edificio más alto de la zona y su estratégica ubicación, que permite disfrutar no sólo de una panorámica del centro de la ciudad sino que potencia nuestra pasión por seguir descubriendo cada rincón de Sídney.

Sus 590 habitaciones son perfectas para conectarnos con el fastuoso «landscape» gracias a sus ventanales de piso a techo.

Los amplios cuartos están preparados en su estética, decoración, ambientación y tecnológica para que la sensación de confort sea perfecta.

Los baños con bañera están integrados a la habitación, lo que amplia la noción de espacialidad.

Y si con las vistas de las habitaciones no nos alcanzara, la piscina infinita junto a un rooftop bar, se funde con la ciudad, para hacernos sentir realmente especiales.

El Fitness Center cuenta con las más modernas máquinas TechoGym para entrenamientos aeróbicos y musculares.

Y sus diferentes propuestas gastronómicas, tres bares y un restaurante de autor, hacen resaltar la tradición francesa en su máxima expresión.

Sofitel Darling Harbour es vivir Sídney de una forma diferente, combinando la cultura y espíritu australiano con el estilo francés.

Bienvenue.