El llamado Metro City Ring, el nuevo sistema de subtes de Copenhague, debutó a finales de septiembre de este año, y sorprendió al mundo por la estratégica conectividad que ofrece a los ciudadanos y visitantes, como así también por el gran trabajo arquitectónico y de diseño (además de los restos de ingeniería que implicó).
Después de ocho años de construcción, representa el proyecto más grande realizado en la ciudad en 400 años, tras una inversión que se estima requirió de unos 3.800 millones de dólares.
Las ahora 17 nuevas estaciones, que abarcan una extensión de 15.5 kilómetros de largo, uniendo los llamados tres vecindarios puente, con la estación central y la Plaza del Ayuntamiento, se ampliarán a un total de 44 a finales de 2024.
El Metro City Ring fue descripto como el mayor proyecto de construcción en la capital de Dinamarca desde la época del rey Christian IV, quien construyó muchos de los edificios históricos de la ciudad y gran parte del área de Christianshavn en el siglo XVII.
Además, alrededor de los ingresos a las estaciones se construyeron plazas públicas, con 150 bancos y 800 árboles. Los parques no solo permiten el acceso al subterráneo, sino que buscan alentar la llegada de comercios y viviendas.