¿Cómo se dice correctamente? ¿Árbitro, referí o réferi? ¿Y árbitra?

De acuerdo a la Fundación Instituto Internacional de la Lengua Española (Fendéu), cuando uno se refiere a la persona que se encarga de hacer cumplir el reglamento en un deporte como el fútbol o futbol (ambas grafías son correctas), se puede decir árbitro, referí o réferi, tanto con pronunciación aguda o esdrújula.

Entonces, ¿no hay diferencias entre referí o réferi?. No, ninguna. Todas son formas correctas, aceptadas por la Real Academia Española.

También, dependiendo del deporte, se lo puede llamar oficial, juez, juez de línea, comisario, juez de touch, aunque no representan 100% lo mismo.

En cuanto al uso dela palabra árbitra, es la forma adecuada de formar el femenino de árbitro y se recomienda concordarla con el artículo en femenino (por ejemplo, la árbitra o una árbitra).

Orígenes

La palabra árbitro viene del latín arbiter (juez) derivado de ad- (hacia) y baetere (ir), pues cuando hay una disputa, uno va hacia el árbitro para que la resuelva.

Según publicó el portal actualidadarbitral.com, sobre el nacimiento del árbitro, indicó: «Al principio, se presuponía la honradez y caballerosidad de los jugadores para ponerse de acuerdo entre ellos y por lo tanto no había nadie que arbitrara. Más tarde, se vería que algunas veces había dudas en la interpretación de las reglas y aparecieron los umpires, que eran una especie de “delegados”, uno por cada equipo, colocados detrás de cada portería, y que decidían juntos en caso de dudas».

«La primera referencia al referee (árbitro) data de 1871, en la Reglamentación de la FA Cup (1871), hace referencia al referee (árbitro) como figura consultiva y fuera del terreno de juego», resaltó el sitio especializado.

Al referirse al significado de la palabra, la RAE indica: «Persona que en algunas competiciones, normalmente deportivas, cuida de la aplicación del reglamento, sanciona las infracciones o fallos y valida los resultados».

También, «persona cuyo criterio se considera autoridad», como por ejemplo, árbitro de la moda, haciendo clara referencia a que el término no se aplica exclusivamente al deporte, sino a otras instancias.