[Crítica] 24 Legacy: ¿puede sobrevivir la serie sin Jack Bauer?

Tenemos un ex soldado de las fuerzas especiales que parece ser el único héroe que nos salve de un atentado terrorista. Tenemos un senador que se presenta como candidato a presidente. Tenemos traidores dentro del gobierno. Tenemos una ex directora de CTU que electrifica a su superior para sacarle información. Y, claro, tenemos el tiempo real.

Los primeros capítulos de “24: Legacy”, muestran que hay varios puntos en común con la serie original.

Pero nos faltan el carisma, los personajes creíbles, los diálogos originales y, por supuesto, Jack Bauer.

En el último tiempo existieron dudas de si “24” era Kiefer Sutherland o el actor era sólo el protagonista principal que podía ser fácilmente reemplazado.

Después de ver “24: Legacy”, no quedan dudas de que “24” era Jack Bauer.

En este reboot de la exitosa serie, que llevó a que escritores como Mario Vargas Llosa se mostraran como fervientes fanáticos, el protagónico principal está a cargo de Corey Hawkins (en su personaje de Eric Carter), quien en todo se momento sigue una esencia que se transmite a la mayor parte del elenco: actuaciones forzadas, quizás por un guión flojo o por un director con poca energía o porque los actores realmente no están a la altura de lo que fue “24”.

Si bien Jack Bauer nos tenía acostumbrados a situaciones extremas en donde se presentaba como un “inmortal”, Eric Carter parece una caricatura de lo que un agente de la Agencia Antiterrorista debería ser.

Es cierto que “24” tuvo sus temporadas brillantes y otras menos logradas (quizás la sexta y séptima, figuren entre las peores). Pero dejó una legado que “Legacy” parece no poder seguir.