Es uno de esos destinos soñados, por sus playas tropicales, la abundancia de su naturaleza y una rica historia cultural. Por eso, en #Conocedores, les presentamos algunas de las mejores cosas para hacer en un viaje por Puerto Rico.
Para disfrutar de la animada vida nocturna, la historia y la cultura, la capital San Juan es una parada obligatoria. La ciudad tiene playas, montañas verdes, atracciones culturales únicas y deportes acuáticos de primer nivel.
También se puede conducir a lo largo de los 269 kilómetros de la Ruta Panorámica, que recorre las montañas verdes y el interior de la isla.
En San Juan de Puerto Rico, también encontraremos el impresionante Castillo San Felipe del Morro (también conocido como “El Morro”), una fortaleza construida por los conquistadores españoles para proteger el muelle, que se eleva 43 metros sobre el nivel del mar.
Al otro lado de la ciudad se encuentra el Castillo San Cristóbal, una estructura bien conservada que fue construida para vigilar la entrada este de San Juan.
Otro sitio arquitectónico e histórico destacado es la Cathedral of San Juan Bautista (Catedral de San Juan Bautista), donde están enterrados los restos de Juan Ponce de León, el descubridor de Puerto Rico.
En dirección al sur desde la ciudad antigua, encontraremos los vecindarios de Condado e Isla Verde, donde las playas doradas están llenas de hoteles, tiendas y restaurantes.
Condado ofrece bulevares que se pueden recorrer a pie y que están llenos de clubes, vida nocturna y algunos de los mejores restaurantes de la isla. Isla Verde, a pocos minutos del aeropuerto internacional, tiene dos de los principales resorts de San Juan: The Ritz-Carlton y el icónico El San Juan Hotel.
Con unas 365 playas, Puerto Rico ofrece una distinta para cada día del año. Una de las más populares es la Luquillo Beach (playa Luquillo), que está rodeada de palmeras y es conocida como “la capital del sol” de Puerto Rico. Aquí, el agua está protegida por un arrecife, lo que la convierte en la mejor opción tanto para los que quieren practicar esnórquel como para los que aprecian la tranquila marea.
Avanzando por la costa, el resort de lujo El Conquistador cuenta con su isla privada, Palomino Island (isla Palomino), un excelente lugar para nadar, practicar esnórquel y pasear a caballo.
Los coloridos barcos pesqueros adornan la pintoresca —y sorprendentemente tranquila— Crashboat Beach (playa Crashboat) de Aguadilla, ubicada en la costa oeste de la isla. (Su nombre proviene de su antiguo uso como puerto militar para rescatar a los equipos de la Fuerza Aérea de Estados Unidos que eran “derribados” durante los entrenamientos).
En el extremo suroeste de la isla, la hermosa arena blanca suave y las aguas cristalinas de Buye Beach (playa Buye) se complementan con los cercanos acantilados color rosa de Cabo Rojo. Es popular entre los lugareños, pero no es muy conocida entre los viajeros. Rincón, en la costa oeste de Puerto Rico, es uno de los lugares favoritos de los surfistas.
Ubicado solo 43 kilómetros al sureste de San Juan, El Yunque es el único bosque lluvioso del Servicio de Parques Nacionales de Estados Unidos. El paisaje está lleno de cascadas, senderos para caminatas, ranas coquíes que cantan y coloridos loros. Los recorridos en tirolesa ofrecen una vista de las copas de los árboles mientras uno se desliza por un cable a 24 metros del suelo.
Las bahías bioluminiscentes, donde el agua brilla durante la noche, son otra atracción destacada. Uno puede ser testigo de este fenómeno natural creado por microorganismos que se encienden cuando se agitan y forman ríos de luz brillante en la costa sureste de Fajardo, en el extremo suroeste de la isla en La Parguera y en el Puerto Mosquito de Vieques. También se puede explorar las profundidades en las Cavernas del Río Camuy: sus 220 cámaras están llenas de formaciones rocosas.