Hacer turismo en Venecia se vuelve molesto para los turistas

Ciudades y países que históricamente centraron sus fuentes de ingresos en el turismo, en los últimos años se han vuelto en contra de los viajeros, hablando de «exceso de turistas», y como forma de solucionar una situación que necesita ser estudiada según el caso, algunos destinos están empezando a cobrar un impuesto o tasa. Y ese es el caso de uno de los lugares más atractivos de Italia, en donde ahora hacer turismo en Venecia se vuelve molesto ya no sólo para los propios ciudadanos, que quieren preservar el patrimonio, sino también para los turistas.

Durante la temporada alta de 2024, las autoridades de la ciudad trabajaron en una prueba piloto en el que los visitantes que viajaban a Venecia por un día, sin alojarse en ningún hotel, tenían que pagar 5 euros en días específicos, con un alto tránsito de personas. Pero, ¿cobrar 5 euros realmente impedirá que un viajero deje de visitar el destino, por el que pagos cientos o miles de dólares en llegar, ya sea en pasajes de avión, tren, hoteles en otras ciudades, comidas y traslados?

Según datos publicados por la revista Fortune, «en 2023, 5.7 millones de personas visitaron Venecia y los días pico registraron más de 80.000 llegadas. Sin embargo, el experimento no logró reducir el número de visitantes a la icónica ciudad de los canales. En cambio, durante los primeros 11 días del período piloto, se registraron casi 750.000 visitantes. En los mismos días de 2023, hubo alrededor de 680.000 entradas».

A pesar de que los resultados claramente demuestran que imponer una tasa o impuesto, parece más un método recaudatorio que una restricción para los viajeros, las autoridades en una suerte de «empecinamiento terapéutico», anunciaron que para 2025 volverán aplicar la medida, y en lugar de cobrar 5 euros, cobrarán 10 euros.

Quizás una propuesta más acertada, sería poner un límite al número de visitantes que viajan a Venecia si se busca proteger el patrimonio y la vida de los ciudadanos. Cobrar un impuesto, no sólo demostró no ser efectivo, sino que además, es una ofensa para los turistas que ya de por sí, dejan muchos dólares / euros a las arcas públicas y privadas, ya sea por transporte, bares, restaurantes, tours, merchandising, recuerdos, tiendas y más.