Roma quiere ponerse firme, y ya lo había hecho no hace mucho tiempo cuando dijo que multaría a quienes se bañen en las fuentes o coman junto a ellas. Ahora, la ciudad va por más, y los clásicos gladiadores que cualquier persona que haya visitado Roma los ha visto, ya no tienen la bendición de la ciudad.
Los turistas ya no podrán tomarse fotos con personas disfrazadas de gladiador romano. Aquellos atrapados vestidos así y solicitando a los turistas dinero pueden recibir una multa de € 400.
En cuanto al alcohol, beber en la calle desde las 10 p.m. a las 7 a.m. ahora está prohibido, como también las tiendas deberán dejar de hacerlo en esos horarios. Por otra parte, los bares deberán dejar de servir a las 2 de la mañana.
Los turistas deberán respetar estas normas y pueden ser multados en caso que no lo hagan, en una fuerte iniciativa para controlar el desorden que suele tener la ciudad italiana.
Si estamos por viajar a Roma, será buena idea estar atento a las reglas en ese momento y no pasar un mal momento.