Si quisiéramos llegar a la cima de los grandes rascacielos del mundo, obviamente podemos hacerlo en sus modernos ascensores. ¿Pero cuántos escalones hay que subir para llegar a los edificios más altos del mundo si quisiéramos hacerlo sin la tecnología?
En algunos casos, la única forma de subir a algunos edificios como el Duomo de Florencia o la Catedral de San Esteban de Viena, son las escaleras. Puede que la subida a pie cueste, pero las vistas de la ciudad desde arriba suelen ser tan espectaculares que olvidamos el esfuerzo realizado.
El ascensor es un lujo que permite a ingenieros y arquitectos modernos pensar en grande y apuntar alto, lo que se traduce en increíbles estructuras como el One World Trade Center de Nueva York y en poder presumir de contemplar las impresionantes vistas que ofrecen.
Sin embargo, a algunas personas les gustan las ventajas de usar las escaleras: nos mantienen activo obligándonos a hacer ejercicio y, además, ayudan a quemar calorías. Todos los años New York Road Runners, la organización de corredores más importante de Nueva York, celebra una carrera que consiste en subir al Empire State Building, a pie. Los participantes suben corriendo los 1860 escalones. A algunos también les gusta la idea de renunciar al ascensor a cambio de llegar a pie a lo más alto de, por ejemplo, la Torre Eiffel (tras subir 674 escalones).
En la siguiente infografía, podremos ver cuántos escalones hay que subir para llegar a los edificios más altos y otros no tanto: