Cómo se clasifican los huracanes y cuáles son sus categorías

Los huracanes son uno de los fenómenos meteorológicos más potentes y peligrosos del planeta. Para prever sus posibles daños y tomar medidas de precaución, ¿cómo se clasifican los huracanes y cuáles son sus categorías?

Un huracán es un tipo de ciclón tropical que se forma sobre aguas cálidas en regiones del océano Atlántico y el noreste del Pacífico. Cuando se desarrollan en otras zonas del mundo, reciben nombres como tifones (en Asia) o simplemente ciclones (en el océano Índico y el Pacífico Sur). Aunque cambie su nombre, el fenómeno es esencialmente el mismo: un sistema de tormenta con vientos rotatorios extremadamente fuertes.

Cómo se clasifican los huracanes según la escala Saffir-Simpson

La escala más utilizada en América y otras partes del mundo es la escala Saffir-Simpson, que clasifica los huracanes en cinco categorías basadas en la velocidad sostenida del viento:

• Categoría 1: Vientos de 119 a 153 km/h. Daños mínimos, pero posibles afectaciones a árboles y techos ligeros.
• Categoría 2: Vientos de 154 a 177 km/h. Daños moderados, caída de árboles y apagones eléctricos.
• Categoría 3 (huracán mayor): Vientos de 178 a 208 km/h. Daños significativos a estructuras y vegetación.
• Categoría 4: Vientos de 209 a 251 km/h. Daños severos, colapso de techos, cortes prolongados de electricidad y agua.
• Categoría 5: Vientos superiores a 252 km/h. Destrucción catastrófica, grandes inundaciones y pérdidas masivas de infraestructura.

Otras formas de clasificación de ciclones en el mundo

En otras regiones se utilizan diferentes escalas para clasificar ciclones tropicales. Por ejemplo:

• En el Pacífico occidental, la Agencia Meteorológica de Japón y otras entidades usan una clasificación basada en vientos sostenidos en 10 minutos.
• En India y Australia, los ciclones se clasifican como ciclón severo, muy severo o extremadamente severo, dependiendo de la intensidad del viento y la presión central.

La clasificación de huracanes no solo permite comprender su fuerza, sino que también es clave para emitir alertas tempranas y organizar evacuaciones. A mayor categoría, mayores son los riesgos para la vida humana, la infraestructura y el medioambiente.